Emprender es una opción laboral que ha cobrado una inmensa fuerza en las últimas décadas, con la proliferación de las startups (nuevas empresas con grandes posibilidades de crecimiento y la tecnología en su ADN) y de la figura del freelance, un trabajador por cuenta propia que toma las riendas de su propio negocio. Parece que el panorama de la era digital invita a emprender, pero ¿es tan fácil como nos cuentan?
La respuesta, la encontramos rápidamente en la definición de emprender que facilita la RAE:
Acometer y comenzar una obra, un negocio, un empeño, especialmente si encierran dificultad o peligro.
Así pues, parece que por definición la dificultad va de mano del emprendimiento. Por suerte, hacerlo no es ni tan fácil como cuentan unos ni una misión imposible como vaticinan otros. ¿Cuáles son las claves para tener más posibilidades de lograr el éxito si emprendes en la era digital? Estas dos son básicas:
- Tener una buena idea y un modelo de negocio claro
- Tener la formación necesaria para evitar problemas predecibles
La formación: aliada de la ejecución de una buena idea
Con el objetivo de ayudarte en estos puntos, desde IEP creamos nuestro Máster de Emprendimiento y desarrollo de ideas de negocio, donde tratamos de proporcionarte los conocimientos necesarios para adquirir todos los beneficios derivados de la Transformación Digital. Al final del programa, tendrás la oportunidad de ver si tu proyecto empresarial es viable antes de invertir dinero y medios y podrás crear tu plan de negocio.
Precisamente, dos de los principales errores al comenzar con un negocio son no contar con una idea de valor o no tener un plan de negocio.
Si no se cuenta con ninguna de las dos es difícil que todo salga bien y, si solo tienes una buena idea, es posible que nunca puedas llevarla a cabo por falta de planificación. Por eso insistimos en que es primordial invertir un poco de tiempo en la formación para ahorrarnos disgustos y problemas futuros.
La innovación y la diferenciación: ¿Acaso no está todo inventado?
En la era digital parece que todo está inventado… Es difícil innovar en un producto o servicio, a pesar de que contamos con más herramientas que nunca para hacerlo. Por eso, el proyecto o producto que ofrece un emprendedor no tiene por qué ser nuevo a la fuerza, pero sí diferenciado. El precio, la exclusividad, el diseño, el compromiso con el medio ambiente, la rapidez en el envío… Para emprender con éxito en estos tiempos hay que tener muy clara la propuesta de valor.
La financiación: el constante problema del emprendedor
Obtener los fondos para comenzar con un proyecto siempre ha sido una dificultad al principio. Sin embargo, conocer de antemano las opciones de financiación disponibles y las ayudas al emprendimiento hará que se haga un poco más fácil encontrar el apoyo económico necesario para comenzar.
La lucha contra la falta de visibilidad
Al abrir un comercio físico el emprendedor es visible desde el momento en el que se está estableciendo o abre sus puertas. Sin embargo, en el entorno online donde operan muchos de los emprendedores hay que redoblar esfuerzos para tener visibilidad y darnos a conocer a gente que no ha oído hablar de la marca. Por eso, los conocimientos de marketing digital son más que recomendables.
Otras piedras en el camino: logística, impuestos y burocracia
Finalmente, al iniciar encontrarás otras piedras en el camino como la burocracia para establecerte como negocio y sus respectivos impuestos; o la logística, también con sus particularidades para los que emprenden con un E-commerce. Aun así, las herramientas para comenzar un proyecto en estos momentos están al alcance de las personas con ganas de hacerlo y, con la formación adecuada, convertir tu idea en negocio puede ser de lo más gratificante.
